Primeras declaraciones de los hijos de Rob y Michele Reiner tras el asesinato de sus padres: No hay palabras para describir el inimaginable dolor que sentimos

La trágica muerte de Rob y Michele Reiner, presuntamente a manos de su hijo Nick, ha sacudido a Hollywood. Decenas de actores, directores, políticos y amigos cercanos del matrimonio han expresado su dolor y admiración por la pareja, mientras que, hasta ahora, la familia había guardado silencio.

Este miércoles, tres días después del hallazgo de los cuerpos, los hijos mayores de la familia, Jack y Romy, enviaron una nota a medios como People y TMZ. En el comunicado expresaron su consternación y solicitaron respeto y privacidad durante este difícil momento. Romy fue quien encontró los cuerpos de sus padres en la residencia familiar.

Detalles del caso y antecedentes

Rob y Michele Reiner se conocieron mientras él trabajaba en la película que se convertiría en una de las comedias románticas más icónicas del cine estadounidense, Cuando Harry encontró a Sally. Según relatos, fue Michele quien influyó en el cambio del final, transformándolo de una conclusión melancólica a una más optimista. La pareja se casó en mayo de 1989 y tuvo tres hijos: Jake, de 34 años; Nick, de 32; y Romy, de 28.

El caso no es el primero en el que Rob Reiner se ve envuelto en controversias legales. Anteriormente, la actriz y directora Penny Marshall había sido objeto de una investigación relacionada con su hija Tracy, quien había sido la única familia en pronunciarse públicamente. En una breve intervención en la cena de noticias de NBC News, la hija declaró: “Vengo de la mejor familia que jamás haya existido. No sé qué decir. Estoy en shock”.

El mismo miércoles, Nick Reiner compareció ante el juzgado. Su comparecencia fue breve y sin imágenes públicas. No declaró su culpabilidad ni su inocencia. Fue escoltado con esposas y llevaba un chaleco azul sin mangas. Su abogado, Alan Jackson, conocido por haber defendido a figuras como Harvey Weinstein y Kevin Spacey, se negó a presentar una declaración en nombre de su cliente. La audiencia continuará el 7 de enero, cuando se leerán los cargos.

El lunes anterior, el fiscal del Distrito de Los Ángeles, Nathan Hochman, anunció en una rueda de prensa que Nick enfrentará dos cargos de asesinato en primer grado con agravantes. Según el fiscal, los cargos incluyen el uso de un arma mortal, un cuchillo, y pueden conllevar la pena de muerte o cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Los cuerpos de Rob, de 78 años, y Michele, de 68, fueron encontrados el domingo por la tarde, alrededor de las 15:30, en su casa de Brentwood, en el suroeste de Los Ángeles. Al parecer, habían programado una sesión de fisioterapia que no se realizó; el especialista contactó a su hija Romy, quien acudió al domicilio acompañada del actor Billy Crystal y su esposa Janice. Allí descubrieron la escena del crimen.

La casa no mostraba signos de haber sido forzada, lo que llevó a la policía a buscar rápidamente a Nick, considerado el principal sospechoso. Según testigos, la noche anterior, en una fiesta de Navidad organizada por Conan O’Brien, Nick mostró un comportamiento errático y tuvo una discusión pública con varios asistentes. Más tarde, alrededor de las 4 a.m. del domingo, se registró en un hotel de Santa Mónica, pagando solo una noche; la mañana siguiente, el personal de limpieza encontró la habitación impregnada de sangre.

Finalmente, alrededor de las 21:15 del mismo domingo, la policía localizó a Nick en el área de Exposition Park, a unos 30 kilómetros de su residencia. Fue arrestado y puesto a disposición judicial. Actualmente se encuentra recluido en la instalación Twin Towers Correctional Facility, bajo vigilancia antisuicidio.