El Supremo confirma el procesamiento de Ábalos y Koldo García por la trama de las mascarillas

El Tribunal Supremo ha despejado este miércoles el camino para que el magistrado Leopoldo Puente abra el juicio oral contra el exministro de Transportes José Luis Ábalos y su antiguo asesor Koldo García, acusados de participar en una presunta trama de corrupción en la compra de mascarillas durante la pandemia de COVID‑19. La Sala de Apelaciones rechazó por unanimidad los recursos interpuestos por ambos, confirmando el auto del magistrado Puente del pasado 3 de noviembre, que puso fin a la fase de instrucción y propuso la apertura del juicio contra Ábalos, García y el comisionista Víctor de Aldama.

Consecuencias para el escaño parlamentario
Tras esta resolución, la Mesa del Congreso acordó, también este miércoles, suspender los derechos y el salario de Ábalos, quien actualmente ejerce como diputado del Grupo Mixto. La medida se fundamenta en el artículo 21 del Reglamento del Congreso, que establece que los diputados quedarán inhabilitados de sus funciones cuando “se hallen en situación de prisión preventiva y mientras dure ésta”. Desde ese momento, Ábalos dejará de percibir su remuneración de alrededor de 6.000 euros mensuales y no podrá participar en las votaciones ni en la actividad parlamentaria.
La presidenta del Tribunal Supremo, Isabel Perelló, firmó al mediodía el auto dictado por la Sala Penal, el cual será remitido al Congreso en el mismo día.
La decisión del alto tribunal también autoriza al juez Puente a iniciar el juicio oral. Según la jurisprudencia del Supremo, una vez abierto el proceso, el acusado será juzgado en la instancia que llevó a cabo la instrucción, aun cuando pierda la protección del fuero parlamentario. Por tanto, si Ábalos intenta dilatar el procedimiento, deberá renunciar a su escaño en los próximos días; de lo contrario, el juicio se celebrará en el Tribunal Supremo en los próximos meses.
Ábalos ha rechazado hasta ahora la idea de dimitir, una postura que le costó la ruptura con su anterior abogado. Sin embargo, la perspectiva de perder su sueldo y otros derechos parlamentarios podría motivar una reconsideración.
En el auto de este miércoles, la Sala de Apelaciones señaló que el instructor ha reunido un “robusto arsenal indiciario” contra Ábalos, Koldo García y Víctor de Aldama, lo que ha llevado a la Fiscalía a solicitar 24 años de prisión para el exministro y 19 años y medio para su antiguo asesor. El auto, firmado por los magistrados Antonio Del Moral, Juan Ramón Berdugo y Pablo Llarena, desestima los argumentos presentados por la defensa, que sostenían la falta de pruebas suficientes.
Los jueces explicaron que los alegatos del exministro y su asistente “no logran desvirtuar la solidez de los indicios señalados por el instructor, que ya permiten la preparación del enjuiciamiento una vez constatada la existencia de una base indiciaria racional y suficiente”. Añadieron que no se trata de un enjuiciamiento prematuro, sino de la fase correspondiente tras la comprobación de pruebas suficientes.

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