La campaña extremeña dice adiós a Robe, que se metió en política a su manera

El cantante y poeta Roberto “Robe” Iniesta, vocalista y creador de Extremoduro, falleció a los 63 años, dejando un vacío profundo en la cultura musical de Extremadura. Su canción “Tierra de conquistadores, no nos quedan más cojones”, del álbum *Extremaydura* (1989), se ha convertido en himno de una generación que, con humor y rebeldía, denunció la falta de oportunidades en la región.

Su influencia trasciende la música: Robe se consolidó como un referente popular y un símbolo de la identidad extremeña, combinando una estética rural y arcaizante con una visión vanguardista que le permitió codearse sin complejos con figuras del rock nacional e internacional.

Reacciones de los partidos políticos

Las redes sociales se llenaron de mensajes de condolencia de los principales actores políticos, a pocos días de iniciar la campaña electoral que concluirá en once días. La presidenta de la Comunidad Autónoma, María Guardiola (PP), lamentó la pérdida diciendo: “Se va la voz de mi generación y de mi tierra. Se va un poeta, la rebeldía y el talento de Extremadura”. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, también destacó la “huella imborrable” que deja el artista en “generaciones enteras”.

Por su parte, Miguel Ángel Gallardo (PSOE) describió a Robe como “un poeta capaz de convertir lo cotidiano en poesía y lo difícil en verdad”, y recordó su legado musical. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compartió un vídeo de Extremoduro interpretando “La vereda de la puerta de atrás” y elogió su entrega “con verdad, con rabia, con belleza”.

Irene de Miguel, candidata de Unidas por Extremadura (coalición de Podemos e IU), rindió homenaje citando versos de la canción “Puntos suspensivos” y describió a Robe como “un poeta de la tierra y tejedor de sueños”. Nerea Fernández, líder de IU, también lo calificó como “un poeta que nos enseñó a no rendirnos jamás”.

El candidato de Vox, Óscar Fernández, recordó a Robe como “un ícono extremeño” y recordó sus críticas al partido, señalando la ironía de que Vox quisiera honrarlo como “hijo predilecto de Plasencia”.

En 2008, Robe protagonizó un enfrentamiento con el expresidente regional Juan Carlos Rodríguez Ibarra, rechazando el proyecto de la refinería del Grupo Gallardo por sus efectos medioambientales y por considerar que la iniciativa se imponía a una población joven y poco protestante.

Durante la entrega de la Medalla de Extremadura en 2014, cuando el PP gobernaba la comunidad, el artista, con su característico humor negro, solicitó recursos para los músicos y creadores locales: “Necesitamos locales de ensayo, talleres de escritura, pintura, escultura y salas de conciertos”. Su petición reflejó la constante defensa de la cultura y la creación en la región.

Robe también inspiró a colectivos juveniles como “Sanguijuelas del Guiana”, un grupo de veinteañeros que lucha por mayor oportunidad en los pueblos de la comarca de la Siberia, y cuya música surgió tras un concierto del artista en Mérida.

Su legado, tanto musical como social, permanecerá como testimonio de una voz que, con sinceridad y rebeldía, describió la realidad extremeña y exigió un futuro con más espacios para la cultura. Descanse en paz, Robe Iniesta.