Ayuso rompe dos días de silencio sobre el escándalo del hospital de Torrejón: Cualquier mala práctica será erradicada con contundencia

El escándalo surgido en el Hospital Universitario de Torrejón de Ardoz ha obligado a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a pronunciarse este viernes tras más de 48 horas de silencio. La mandataria, que había evitado comentar el asunto pese a su competencia directa, respondió a las revelaciones publicadas por EL PAÍS, en las que se difundieron audios en los que Pablo Gallardo, CEO de Ribera Salud, ordenó a los directivos del centro público manipular la lista de espera para favorecer intervenciones rentables y rechazar casos menos lucrativos.

Reacciones de los partidos políticos

Ayuso afirmó que cualquier irregularidad será “erradicada con contundencia, con la información necesaria en la mano, sin contemplaciones, pero con responsabilidad”. Añadió que el modelo sanitario de su gobierno, que delega la gestión de centros públicos a entidades privadas, cuenta con “grandes profesionales” como los del Hospital de Torrejón y que “ni ellos ni los pacientes serán tratados como negocio”. La presidenta aseguró que, de confirmarse los hechos, la comunidad actuará con la mayor firmeza.

El líder del Partido Popular en la región, Alberto Núñez Feijóo, se pronunció antes que la presidenta. En un acto en Don Benito (Badajoz) declaró: “Me alegro de que se haya dado a conocer”. Subrayó que “ese tipo de conductas son contrarias a los principios básicos que debe regir la sanidad de nuestro país”.

Por su parte, Isa Serra, coordinadora autonómica de Podemos, asistió a una concentración convocada en la Comunidad de Madrid para protestar contra las prácticas de Ribera Salud. En su intervención anunció que su grupo había presentado una querella ante el Juzgado de Instrucción de Torrejón contra el gerente del hospital y la empresa, alegando “utilización desleal de fondos públicos, prevaricación, posibles lesiones, coacciones a los trabajadores y denegación de prestaciones sanitarias”. Añadió: “Esperemos que se haga justicia; la ciudadanía está harta de ver cómo se vulnera la salud pública”.

Los audios también revelan que, además de presionar para elevar la lista de espera, Gallardo instruyó a priorizar a pacientes “no capita”, es decir, aquellos que no están asignados habitualmente al hospital pero que solicitan ser atendidos allí, siempre que resulten rentables, relegando la atención a casos menos lucrativos.

Desde la gestión pública, la Comunidad de Madrid ha inyectado 88 millones de euros adicionales a Ribera Salud en los últimos cinco años para la gestión del Hospital de Torrejón. A estos se sumó un rescate de 32,7 millones de euros en julio, destinado a que el grupo pudiera hacer frente a las deudas acumuladas, que en 2022 alcanzaban los 124 millones de euros.

Un portavoz autonómico explicó que el abono extraordinario se debió a la necesidad de reequilibrar el contrato ante gastos no contemplados inicialmente, como el elevado gasto farmacéutico. Según indica el propio Gallardo, la actividad vinculada a la farmacia es una de las áreas que la empresa podría revisar para mejorar su rentabilidad.