El templo urbano que está revolucionando el mundo del perfume

La metáfora que cierra el poemario de Charles Baudelaire, “un mundo puede caber en un frasco”, alude al universo de los olores como un contenedor de recuerdos y emociones. En esa línea, la poeta George Sand afirmó que “el recuerdo es el perfume del alma”, recordándonos cómo una fragancia puede devolvernos a momentos decisivos y bellos que permanecen latentes en nuestro interior.

The Scentuary: una experiencia olfativa en el corazón de la ciudad
Así nace The Scentuary, un concepto innovador de perfumería que abre sus puertas en el número 17 de la calle Goya, en pleno centro de Madrid. Al cruzar su fachada acristalada, el bullicio del barrio queda atrás y el visitante se adentra en un espacio donde el tiempo parece ralentizarse, los sentidos se agudizan y la perfumería se eleva a la categoría de arte.
La ambientación combina luz, música y una colección de cerámicas que albergan cada una de las ocho familias olfativas que estructuran la oferta de la casa. “Recibimos al cliente con una introducción al universo de la marca, nuestras colecciones de perfumes y las ocho familias olfativas que las inspiran”, explica Marta Gabriel, directora de marketing de The Scentuary.
A partir de ese momento, la experta guía al visitante por un recorrido olfativo totalmente personalizado. Cada fragancia se descubre mediante pruebas sensoriales, explicaciones sobre sus ingredientes y la personalidad única que la define.
Las cerámicas olfativas, diseñadas para potenciar la esencia de cada perfume, permiten una interacción inédita con el aroma. “Estas piezas hacen posible experimentar el perfume en su máxima expresión, convirtiendo cada nota en un instante íntimo y contemplativo”, puntualiza Gabriel.
Una vez identificadas las preferencias aromáticas del cliente, el equipo le ayuda a encontrar un perfume –o incluso una combinación de fragancias– que refleje su estilo, personalidad y emociones. El objetivo es transformar el perfume de un simple producto a un relato que se puede oler, tocar y contemplar.
Según Isabel Sánchez‑Lozano, la publicación del recorrido ha generado gran expectación entre los amantes de la perfumería, que valoran la capacidad de las cerámicas para actuar como catalizadores de la memoria y la emoción, transportándolos a ciudades, momentos y recuerdos, e incluso permitiendo “recrear el tacto de una textura o una emoción grabada en la memoria”.
En definitiva, The Scentuary propone una experiencia integral que despierta los sentidos, estimula la curiosidad y convierte cada aroma en un viaje personal y significativo.

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